¿Por qué se deben eliminar las rebabas?
Son muchas las situaciones en las que la presencia de rebabas puede ser un inconveniente, principalmente cuando el objetivo es ofrecer una pieza acabada de mayor calidad. Te contamos las principales razones para lijar rebabas.
- Ajustes y tolerancias: En el ensamble de piezas hechas a partir de chapa cortada y perfiles metálicos, como cocinas o mobiliario industrial, es necesario un encaje preciso. Lo mismo ocurre en los mecanismos, donde las tolerancias demandadas son muy pequeñas. Sin duda, la presencia de estas protuberancias puntiagudas, puede ser un impedimento para conseguirlo, por lo que deben ser removidas.
- Calidad superficial: Es de especial importancia cuando después de un proceso de corte o mecanizado, se quiere aplicar un recubrimiento (p. ej. galvanizado, niquelado, cromado o pinturas). Los recubrimientos tienen como principal objetivo proporcionar al material base una buena protección contra el medio, y si la superficie de la pieza presenta heterogeneidades, el recubrimiento tendrá una falta de adhesión que limitará su función.
- Estética: El aspecto superficial en componentes industriales decorativos, mobiliario de oficina, revestimientos, cubiertas, entre otros, es un factor determinante. Está claro que, un producto correctamente acabado, sin rebabas, tendrá un mayor valor añadido.
- Seguridad: Las rebabas son aristas cortantes que pueden causar fácilmente lesiones al manipular las piezas, ya sea a los empleados como a los usuarios finales. Estas lesiones pueden suponer un alto coste para la empresa en forma de bajas laborales, reclamaciones del cliente o incluso denuncias por daños.
- Prevención de grietas: Una rebaba representa un concentrador de tensión (discontinuidad geométrica donde se concentran los esfuerzos) que puede conducir al fallo prematuro de una pieza sometida a cargas. Esto cobra mucha importancia en aplicaciones estructurales, como depósitos metálicos sometidos a presión.
Maquinaria para el rebarbado con abrasivo flexible
Para la eliminación de rebabas en chapas finas se utiliza generalmente maquinaria de lijado de planos puesto que las piezas suelen ser planas y su procesamiento es sencillo con este tipo de máquina.
Las lijadoras de planos consisten en una banda transportadora que desplaza la pieza bajo uno o varios cabezales equipados con bandas abrasivas que son las encargadas de eliminar las rebabas que sobresalen de la superficie. Este tipo de máquinas pueden ser de banda estrecha, hasta unos 300mm de anchura, para piezas pequeñas, o calibradoras de banda ancha, hasta más de 2m de anchura, para piezas mayores, o para una mayor productividad en pequeñas piezas, pudiendo alimentarlas con diversas piezas en paralelo al mismo tiempo.
Cada uno de los cabezales de lijado realizará un paso de rebabado, por lo que cuanto mayor sea el número de estaciones mejor calidad podrá aportar el proceso, utilizando abrasivos más gruesos de rebabado y posteriormente abrasivos de grano más fino para un afinado que aporte, a la vez, un mejor acabado a toda la superficie de la pieza.
Características de los abrasivos para rebarbar
- Tipo de grano: Para llevar a cabo un proceso de rebarbado con abrasivos flexibles en forma de banda, se pueden utilizar los tipos de grano más comunes, como el corindón o el circonio, aunque en función de la cantidad de material a extraer puede ser más conveniente trabajar con grano cerámico, más agresivo y resistente para un alto poder de corte, o los abrasivos multicapa como el grano compacto, menos agresivos puntualmente, pero con un comportamiento mucho más estable y una duración más elevada.
- Tamaño del grano: la granulometría o numeración indicada en las herramientas abrasivas está relacionada con el tamaño de grano. Si el número es bajo, el grano es basto. Si el número es alto, el grano es más fino. Para eliminar rebabas de un corte laser en chapa fina, se puede utilizar como primer paso un grano entre 80 y 180. El grano 80 será más rápido y efectivo eliminando las rebarbas, aunque puede dejar una superficie excesivamente arañada. Si el tamaño de las rebarbas no requiere de un desbaste importante y se pretende un acabado fino, deberá encontrarse el grano más fino posible que sea suficiente para desarrollar la tarea y a la vez no proporcione una rugosidad muy elevada o un acabado muy basto. La combinación de varios granos consecutivos puede ser una excelente opción si el tiempo de proceso no es crítico o si se dispone de múltiples cabezales.
- Soporte: en un abrasivo flexible en forma de banda, puede ser de tela o papel. Su cometido es anclar el grano abrasivo a una base estable y resistente, a la vez que transmitir la presión de contacto de forma firme y eficiente durante el proceso dinámico que desarrolla la banda. Hay que tener en cuenta que los soportes de papel son más económicos, aunque más susceptibles a resultar rasgados en el caso de enfrentarse con aristas cortantes, como rebarbas, por lo que, en el caso del rebarbado se aconseja siempre utilizar suportes de tela.
Para que el trabajo con máquinas automáticas sea lo más rentable posible, es importante conocer los abrasivos adecuados para cada proceso que se lleve a cabo.
En VSM Abrasivos, somos especialistas en la fabricación de abrasivos flexibles y en su aplicación. Si todavía tienes dudas sobre cómo rebarbar de forma automática una chapa contacta con nosotros y te ayudaremos.