Uno de los acabados más demandados en la decoración es el satinado. Cuando nos enfrentamos al tratamiento superficial de una soldadura y tenemos que dejar un acabado satinado que, de un aspecto homogéneo, el proceso puede ser poco habitual para mucha gente. A continuación, os vamos a dar una guía que facilita todo este proceso, empezando por la maquinaria, accesorios y consumibles necesarios, hasta la ejecución del proceso.
Maquinaria para un satinado:
- Amoladora angular: Las amoladoras más adecuadas permiten trabajar con discos de Ø115 ó 125 mm. Cuanto menor sea el tamaño del disco abrasivo, menor será la superficie que dañemos y luego tengamos que repasar. Por otro lado, necesitaremos que la máquina tenga una velocidad de giro variable.
- Satinadora: Las satinadoras son máquinas portátiles de bajas revoluciones que permiten trabajar de manera longitudinal y que pueden soportar fuertes tracciones mientras trabajan. Montan cepillos o ruedas que suelen ser de 100 mm de ancho y 100 mm de diámetro. Son ideales para llevar a cabo tanto procesos de pulido como de satinado.
Accesorios:
- Plato de soporte de velour: Estos platos permiten un cambio rápido de disco y gracias a su flexibilidad facilitan mucho un lijado fino y homogéneo.
Consumibles:
- Discos de lija: Los discos de lija de velour son la herramienta más versátil para llevar a cabo este tipo de operaciones y son fabricados tanto en 115 mm, en 125 mm como en 150 mm. Además, el rango de calidades, que pueden ir de un grano cerámico a un corindón convencional, y de granulometrías es muy amplio partiendo estas últimas desde un grano 40 hasta un grano 1200.
- Cepillos para el satinado: Estos cepillos son de “non-woven ó vellón”, es una fibra sintética impregnada de abrasivo. Su configuración es muy variable ya que los podemos encontrar montados en láminas, bobinados o incluso en forma de zig-zag. Lo más importante a tener en cuenta es que el grano sea el adecuado para el acabado que buscamos.
Proceso:
- Desbaste: Eliminar totalmente el cordón de soldadura con la amoladora angular o radial, un plato de soporte de (velour) y un disco de grano cerámico para un desbaste rápido y preciso.
- Afinado: Suavizamos las rayas del grano cerámico con la amoladora angular, el plato de soporte de (velour) y un disco de grano compacto.
- Satinado: Eliminamos las rayas del grano compacto con una satinadora y cepillo de satinar con el grano adecuado al acabado que se quiera dar.
Con esta pequeña guía esperamos ayudar a simplificar un proceso que genera muchas dudas, ¡en tan solo 3 pasos!